como lo dijo Joaquin, lo nuestro es un caso de incompatibilidad de caracteres. cuando por fin lo olvido, jura que se muere por mi. y cuando por fin me suicido, le entran ganas de vivir.
estaba yo. yo y nadie más. mirar desesperadamente alrededor, no ver ni sombras, allá a lo lejos, la suya. cada vez más y más chica. se aleja. su sombra, él, se aleja. empiezo a extrañarlo. sola. empieza a doler, de nuevo. y sola, estoy sola. date vuelta, ahora. como la vez que lo tendrías que haber hecho en aquella oscura y fría plaza un incierto domingo. pero ahí, yo no estaba sola. el miedo. estábamos el miedo y yo.