jueves, 20 de mayo de 2010

Estamos como queremos.

No hay causa, no hay razón. Mate va, mate viene y entre cebadas me dijo: "No hay razon, no hay causa, si uno quiere estar así, lo está. Si uno quiere dormir, duerme y si uno quiere enamorarse se enamora. Solamente, hay que saber quién es "uno" y yo creo que vos lo sabes pero no lo queres afrontar, no queres ver que la perfección no existe, no querés ver que no todo es como parece, no querés ver que no hay tal crisis. Será porque eso significaría que nada tiene sentido? Que los enunciados son simples relaciones de significados y significantes? Será que todo es tan.... nada, tan irreal. Pero es ahí cuando vos, con tu pensamiento, vos y tu pensamiento (son dos cosas diferentes?) deben darle la vuelta de rosca más. No antes, no después. Es simplemente ahí. Para encontrarle un sentido a todo y simplemente ser feliz porque al fin y al cabo esa vuelta es la que determina la nada (o el todo) y esa vuelta es la que nos permite estar como queremos".


Mezclas de ficción, realidad, frases nuevas, frases hechas.
Enunciados que revelan la personalidad del garante: el ethos.
Aprender a escribir y a expresarse, poder ver con los conocimientos más de lo que los otros ven.

lunes, 17 de mayo de 2010

Reflejos

Encontrar una identificación después de tanto desencuentro es un placer poco usual. El problema es cuando ese reflejo no es el que queres, el problema está cuando ese reflejo es el que te hace mal. Mirarse al espejo y no verse, ver un ser completamente diferente. Ver lo oscuro, la maldad.
Qué es lo que tengo que hacer? Salir a la vida sin reflejos, afrontarlo o simplemente no salir?
Quiero poder sentirme en paz, quiero hallarla. Poder despertarme una mañana (ya sea de verano o invierno, de primavera o verano) y mirarme al espejo sintiendome plenamente yo. Vuelvo a la incognita de unos meses atrás, necesitamos que los demás llenen nuestra taza de té? Yo me rehuso, otra vez, si otra vez, a pensar que esto sea asi. Estoy segura que soy yo.
No sé ni dónde ni cuando perdí esa plenitud. No sé si fue una noche de verano, no sé si fue un viaje de vuelta. No lo sé, pero tampoco me importa porque sé que en el lugar donde esté ya no está más, porque sé que no es una re-construcción sino una construcción, un empezar de cero y así, poder verme al espejo y sentirme plenamente feliz. viviendo y riendo.

El juicio de Osiris

Pasan las horas, rozando la locura
preso de mi poesia
Mucho altibajo, poca llanura
soy ladron y policia
Caen las gotas, sin previo aviso
viniendo del mas alla
De un inconsciente, ya inmanejable
que no me deja vivir en paz...

De a poco oxidan, esta armadura
Dificil de abandonar
Tengo una cita conmigo
que no me animo a afrontar
Estoy tan lejos de mi
que no alcanzo a ver mi escencia.

Pobre de vos, hoja en llamas
te descargo mi paciencia...

En el juicio de los muertos frente a osiris
mi corazon romperia la balanza
Y sin embargo no consigo darme cuenta
que fantasma dara a luz mi desconfianza
Pero prometo, a mas nadie que a mi mismo
triunfar de nuevo en este juego apasionado
Y el dia que ya no le tema a los abismos
Agradecer a quien estuvo siempre al lado..

No quiero cantar victoria
por describir lo que siento

En mi estado, tras la gloria
y en un terrible momento
Y a vos cancion, de ira y esperanza
prometo no abandonarte
Yo tambien tengo un nudo en la panza
por no poder liberarte
pero, pero al menos por ahora
tu lugar es un cajon
porque es falta de respeto, cantarte sin emocion
Y este intruso que hay en mi, no te merece cantar
te merece alguien mas grande
capaz de inmortalizarte...


{El juicio de Osiris es el acontecimiento más importante y trascendental para el difunto, dentro del conjunto de creencias de la mitología egipcia. En la Duat, el espíritu del fallecido era guiado por el dios Anubisante el tribunal de Osiris. Anubis extraía mágicamente el Ib (el corazón, que representa la conciencia y moralidad) y lo depositaba sobre uno de los dos platillos de una balanza. El Ib era contrapesado con la pluma de Maat (símbolo de la Verdad y la Justicia Universal), situada en el otro platillo.Mientras, un jurado compuesto por dioses le formulaba preguntas a cerca de su conducta pasada, y dependiendo de sus respuestas el corazón disminuía o aumentaba de peso. Dyehuty, actuando como escriba, anotaba los resultados y los entregaba a Osiris.
Al final del juicio, Osiris dictaba sentencia:
Si esta era afirmativa su Ka y su Ba podían ir a encontrarse con la momia, conformar el Aj y vivir eternamente en el Aaru (El Paraíso en la mitología egipcia). Pero si el veredicto era negativo, su Ib era arrojado a Ammit, la devoradora de los muertos (un ser con cabeza de cocodrilo, melena, torso y brazos de león y piernas de hipopótamo), que acababa con él. Esto se denominaba la segunda muerte y suponía para el difunto el final de su condición de inmortal; aquella persona dejaba de existir para la historia de Egipto.}